CÓMO LAVAR TUS COLETAS DE CABELLO NATURAL
Las coletas de cabello natural son una de las formas más fáciles y rápidas de agregar longitud, volumen y estilo a tu cabello natural.
Pero un buen cuidado es importante, y cuidarlas es imprescindible si quieres asegurarte de que duren el mayor tiempo posible. ¿Sabías que las coletas naturales pueden durar años con el cuidado adecuado? Así es, ¡años!
Sin embargo, garantizar esta longevidad de tu cabello requerirá un poco de compromiso, por lo que te recomendamos incorporarlo a cualquiera de tus prácticas de cuidado personal y hacerlo lo más lujoso posible. ¿Por qué no poner música, encender algunas velas y disfrutar lavando tus preciosos mechones?
A nivel de productos, sí puedes, prioriza el uso de productos profesionales, marcas naturales, sin sulfatos ni sales y líneas nutritivas.
A continuación dividiremos el proceso en seis sencillos pasos.
Primero: Cepillado
Antes de hacer cualquier cosa con tus extensiones, asegúrate de cepillarlas suavemente. Este paso siempre es lo primero. ¿Por qué? Hacerlo minimiza las posibilidades de quedar con un gran enredo más adelante.
Para comenzar, sostén la base de la coleta, con la otra mano, trabaja las puntas del cabello con un cepillo plano de madera, subiendo progresivamente hasta la base.
Segundo: Mojar el cabello
A continuación, moja el cabello por completo. Para hacer esto, recomendamos sostener la base bajo un grifo con cuidado para que no tenga la oportunidad de enredarse. Con la otra mano, pase los dedos a lo largo del cabello para soltar y enjuagar cualquier producto o acumulación de aceite.
Tercero: CoWash
¿Qué es el CoWashing? CoWashing es sin duda nuestra técnica favorita para cuidar el cabello natural. CoWashing significa lavado solo con acondicionador, lo que significa que en lugar de utilizar champú, se utiliza un acondicionador para lavar el cabello. Después de eso, en realidad es sólo el acto de enjuagar el cabello con agua. Este paso lo recomendamos en las coletas rubias o con mechas ya que es un cabello más delicado, de lo contrario puede realizar una rutina normal con champú.
¿Cómo hacerlo? Después de mojar el cabello, coloque una cantidad generosa de acondicionador en una palma y, con los dedos de la otra mano, páselo por el cabello (en secciones si es necesario) hasta que cada mechón esté saturado.
Si desea acondicionar profundamente sus extensiones, extiéndalas sobre una superficie limpia y déjalas reposar durante 15 a 30 minutos. Si las acondicionastes recientemente y simplemente quieres un lavado rápido, puedes dejar que el acondicionador repose durante solo dos o tres minutos.
Cuarto: Enjuagar
Enjuague suavemente las extensiones bajo un chorro ligero de agua tibia, nunca caliente. Puedes utilizar los dedos de la otra mano para peinar delicadamente hacia abajo, para ayudar a sacar el producto del cabello. ¡No escatimes en este paso! Si el acondicionador no se enjuaga por completo, permanecerá en el cabello, atrayendo la suciedad y dificultando la producción de mucho volumen incluso después de que esté seco.
Quinto: Paciencia
El siguiente paso es fácil: ¡deja que tus extensiones reposen y se sequen al aire! Para ello, recomendamos extender el cabello sobre una toalla de microfibra, que es delicada con la textura del cabello. Antes de reposarlas, puedes exprimir el exceso de agua con los dedos, pero nunca frotarlos con una toalla. Lo ideal es dejarlos secar durante la noche; asegúrese de que estén completamente secas antes de volver a manipularlos, ya que es más probable que el cabello se enrede cuando está mojado. Puedes aplicarles un leave-in (acondicionador sin aclarado) o idealmente un protector térmico.
Sexto: ¡Cepilla y listo!
Finalmente, cepilla tu coleta una vez más, siguiendo los mismos pasos anteriores. Sabrás que lo has hecho bien si tus extensiones brillan y están suaves al tacto. Siéntete libre de pasar un poco de aceite de acabado por ellos para asegurarte de que el brillo sea duradero.